martes, 19 de febrero de 2008
Sisa y lo que es (también) la Literatura
Publicidad y género gramatical
lunes, 18 de febrero de 2008
Paul Eluard y la sorpresa final
Leí (incompleto, como lo reproduzco ahora) este poema por primera vez en el libro Teoría de la Literatura de V. M. Aguiar e Silva. Es un poema de Paul Eluard. Siempre he pensado que puede servir perfectamente para ilustrar un par de cosas:
- Comprobar cómo este poema, como muchos otros, rompe con lo que espera el lector en su estrofa final: parece un poema de amor, pero al final nos damos cuenta de que es un canto a la Libertad. Por eso el siguiente ejercicio creo que puede dar juego en una clase: podemos presentar el poema sin esa estrofa y pedir a los alumnos que lo completen. Con bastante probabilidad, todos los ejemplos, serán poemas de amor. El ejercicio, claro, se puede complicar: si hemos estudiado métrica pedir, por ejemplo, que compongan versos sometidos a metro y rima
- Comprobar cómo el entendimiento de un poema no depende exclusivamente de claves lingüísticas, sino que también hay que tener en cuenta claves, llamémoslas así, contextuales: Eluard publicó este poema en 1942, cuando Francia estaba ocupada por los nazis. El poema, sabiendo esto, cobra un nuevo sentido.
En mi pupitre, en los árboles,
En la arena y en la nieve,
Pongo tu nombre.
En cada página leída,
En cada página blanca,
Piedra, sangre, papel, polvo,
Pongo tu nombre.
En las efigies doradas,
En las armas de guerreros,
En las coronas de reyes,
Pongo tu nombre.
[...]
En la ausencia sin deseo,
En la soledad desnuda,
En las gradas de muerte,
Pongo tu nombre.
En la salud recobrada,
El riesgo desvanecido,
La esperanza sin recuerdo,
Pongo tu nombre.
Y el poder de una palabra
Me vuelve a traer la vida.
Nací para conocerte,
Para pronunciar tu nombre.
Zits y los adjetivos
domingo, 17 de febrero de 2008
Comienzos de novela
viernes, 15 de febrero de 2008
Max y la morfología
Las dos páginas anteriores pertenecen, creo que ya lo sabéis, a la obra que ha ganado el primer Premio Nacional del Cómic, "Bardín el superrealista". Su autor es Max. He pensado que se pueden usar para estudiar algo de morfología. En algún momento, aunque les pese, los alumnos habrán oído hablar de conceptos como monema, morfema, composición, derivación... y otros, que no es cuestión de anotar ahora. Demos por supuesto que saben qué es un elemento compositivo y que tri- (raíz prefija lo consideran Seco, Andrés y Ramos en su Diccionario del Español Actual, por ejemplo) transmite el significado de 'tres' a aquellos lexemas a los que se une, la actividad consiste en localizar todas aquellas palabras que aparecen en las páginas encabezadas por tri- en las que sea, efectivamente, además de una sílaba, ese elemento compositivo. Comprobarán que no todas.
Con el mismo propósito se puede usar un texto de Mario Benedetti, "Todo lo contrario" del libro Despistes y franquezas:
--Veamos --dijo el profesor--. ¿Alguno de ustedes sabe qué es lo contrario de IN?
--Out --respondió prestamente un alumno.
--No es obligatorio pensar en inglés. En español, lo contrario de IN (como prefijo negativo, claro) suele ser la misma palabra, pero sin esa sílaba.
--Sí, ya sé: insensato y sensato, indócil y dócil, ¿no?
--Parcialmente correcto. No olvide, muchacho, que lo contrario del invierno no es el vierno sino el verano.
--No se burle profesor.
--Vamos a ver. ¿Sería capaz de formar una frase más o menos coherente, con palabras que, si son despojadas del prefijo IN, no confirman la ortodoxia gramatical?
--Probaré, profesor: "Aquel dividuo memorizó sus cógnitas, se sintió dulgente pero dómito, hizo ventario de las famias con que tanto le habían cordiado, y aunque se resignó a mantenerse cólume, así y todo en las noches padecía de somnio, ya que le preocupaban la flación y su cremento."
--Sulso pero pecable --admitió sin euforia el profesor.
jueves, 14 de febrero de 2008
Ajo y la micropoesía
Millás y los sintagmas nominales
Restricciones de paso. Licencia de obras. Normativa contra incendios. Situación crítica. Voladura controlada. Enorme tragedia. Licencia municipal. Genaro Alas. Pedro Casariego. Torre Windsor. Responsabilidad civil. Materiales ignífugos. Gas natural. Productos inflamables. Rociadores automáticos. Efecto chimenea. Propagación vertical. Sistemas de evacuación. Daños materiales. Heridos leves. Trama subterránea. Cristal reticulado. Estragos causados. Comportamiento ejemplar. La noche más larga. Compañías aseguradoras. Planta técnica. Carga de fuego. Pérdidas económicas. Materiales combustibles. Imperio inmobiliario. Familia Reyzábal. Valor de mercado. Buque insignia. Pool asegurador. Lluvia de cenizas.
Firmas afectadas. Importe de la póliza. Protocolos de seguridad. Zona cero. Tensa espera. Resistencia de materiales. Edificio emblemático. Visión dantesca. Actividad comercial. Gerencia de urbanismo. Hito arquitectónico. Cortocircuito eléctrico. Paseo de la Castellana. Inhalación de gases. Equilibrio inestable. Compás de espera. Informes técnicos. Comprensión ciudadana. Pasto de las llamas. Cadena de fallos. Siniestro total. Labores de extinción. Situación crítica. Virulencia sorprendente. Fuentes de la empresa. Diseño de planes. Cámaras térmicas. Número 112. Tareas de prevención. Numerosos efectivos. Evaluación de daños. Demolición inminente.
A mí me pareció genial y me lo sigue pareciendo. Supongo que vosotros, esforzados compañeros del curso sobre el Blog, sabréis enseguida de qué está hablando. Los alumnos, como ya han pasado casi tres años, no sé si lo recordarán. Incluso alguno puede que ni lo sepa. Así que para las memorias flacas y los desconocedores puede ser bueno hacer un primer ejercicio:
Busca en la hemeroteca de El País noticias referentes al incendio del edificio Windsor. http://www.elpais.com/archivo/buscador.html
Es una buena oportunidad para conocer la edición digital de un periódico, además.
A continuación creo que debemos hacer ver a los alumnos que en el texto aparecen todas las posibilidades de construcción en español de un sintagma nominal (ejercicios posibles para que lo anterior quede claro: 1) Busca todos los verbos que aparecen en la columna. 2) Señala ejemplos de las diferentes posibilidades de construcción de un sintagma nominal en español)... y nada más.
Y sin necesidad de ningún verbo, el texto tiene pleno sentido. He ahí el hallazgo formal de la columna. Claro, restituimos fácilmente (¿fácilmente?) lo que falta. Es el momento, entonces, de hacer el ejercicio que propongo:
Reescribe el texto (o uno de sus párrafos: no es cuestión de trabajar mucho, tampoco) añadiendo todos los elementos que creas necesarios, pero sin dejar de usar todos los sintagmas nominales que aparecen. Si alguno quiere hacerlo más difícil puede a) no variar el orden de aparición de los sintagmas nominales, b) construir una oración con cada uno de los sintagmas nominales, en vez de combinar varios en una.
El resultado debe ser, me parece, textos parecidos y a la vez diferentes entre sí, pero que conserven el contenido que se nos transmite en el texto de Millás. Bueno, a ver qué sale.
Si alguno se le ocurre algún otro ejercicio que se pueda hacer con el texto, que sea tan amable de comunicarlo a través de los conductos habituales.